Zumba que te zumbarás, van y vienen sin descanso, de flor en flor trajinando y nuestra vida endulzando.
Nunca camina por tierra, ni vuela, ni sabe nadar, pero aún así siempre corre, sube y baja sin parar.
No lo parezco y soy pez, y mi forma la refleja una pieza de ajedrez.
Vive en el desierto, mata a las personas, debajo de las piedras, muy bien se acomoda
¿Quién hace en los troncos su oscura casita y allí esconde, avara, cuanto necesita?