Una
de
las
formas
más
encantadoras
del
mundo
para
____________________
a
una
hembra
la
aplica
el
pájaro
australiano
,
satinado
o
de
enramada
.
No
es
tan
bello
a
simple
vista
,
tiene
un
tamaño
pequeño
y
un
plumaje
de
color
azul
oscuro
que
despide
un
brillo
metálico
cuando
le
da
la
luz
.
Parece
que
llevara
un
traje
azul
viejo
y
brillante
;
cualquiera
pensaría
que
,
por
la
pobreza
de
su
vestuario
,
ninguna
hembra
se
fijaría
en
él
;
sin
embargo
,
éste
logra
llamar
la
____________________
de
la
pajarita
con
un
truco
muy
astuto
:
le
construye
una
____________________
.
Yo
tuve
la
suerte
de
ver
cómo
construía
un
pájaro
____________________
su
nido
de
____________________
cuando
visité
el
zoológico
con
mis
padres
.
Primero
escogió
dos
montones
de
hierba
y
cuidadosamente
armó
con
ellos
un
círculo
en
el
suelo
.
Después
llevó
ramitas
,
trozos
de
cuerda
y
pajas
y
las
introdujo
____________________
entre
la
hierba
,
hasta
crear
un
edificio
en
forma
de
túnel
.
Fue
en
ese
momento
cuando
me
di
cuenta
de
lo
que
estaba
haciendo
:
había
construido
su
enramada
,
pero
necesitaba
decorarla
.
Para
hacerlo
,
lo
primero
que
llevó
fueron
dos
conchas
vacías
de
caracol
,
a
las
que
siguieron
el
papel
de
aluminio
de
una
____________________
de
cigarrillos
,
un
pedazo
de
lana
que
había
____________________
,
seis
piedritas
de
colores
y
un
pedazo
de
cuerda
rojiza
.
Pensé
que
quizá
le
gustaría
tener
más
cosas
decorativas
y
le
lleve
unas
hebras
de
lana
de
colores
,
unas
cuantas
conchas
marinas
y
algunos
billetes
de
autobús
.
El
pajarito
estaba
____________________
.
Descendió
por
los
alambres
para
quitármelo
todo
de
los
dedos
y
después
volvió
a
saltos
a
su
enramada
para
ordenar
las
cosas
.
Se
quedaba
mirando
la
decoración
un
ratico
y
después
daba
un
salto
adelante
y
cambiaba
de
posición
un
billete
de
autobús
o
una
lana
para
dejarlos
de
la
forma
que
a
él
le
parecía
más
artística
.
Cuando
quedó
terminada
la
enramada
,
tenía
un
aspecto
verdaderamente
encantador
y
decorativo
,
y
el
pájaro
se
puso
delante
de
ella
,
____________________
,
y
de
vez
en
cuando
abría
un
ala
como
para
indicar
orgulloso
lo
que
acababa
de
hacer
.
Gerald
Durrell
,
Encuentros
con
animales
,
Madrid
,
Alianza
,
1981
.