El grooming sucede cuando un adulto se hace pasar por un menor y conversa virtualmente con niños, para lograr que estos le manden fotos, vídeos e incluso se encuentren en lugares.
El hackeo sucede cuando un adulto accede de forma ilegal a computadoras, páginas y redes sociales con el fin de robar información, indagar la identidad del dueño o beneficiarse económicamente.
El ciberbullying ocurre cuando un niño o niña es acosado por personas a través de redes sociales usando chats ofensivos, publicaciones desagradables y correos amenazantes que divulgan información falsa o confidencial.
La sextorsión es una forma de explotación sexual en la que el niño, niña o adolescente es chantajeado por una persona adulta a través de una fotografía o vídeo íntimo, la cual ha compartido a través de Internet mediante el sexting.
El sexting sucede cuando los niños o niñas se toman fotos o vídeos de carácter sexual para enviarlos a personas cercanas o extrañas a través de teléfonos móviles o computadoras.
El phishing es un delito que se comete por medio del envío de correos electrónicos o incluso llamadas telefónicas con el fin de engañar y estafar a las personas invitándolas a visitar páginas web falsas para robarle su información confidencial.
