Las necesidades netas de riego se calculan restando el valor de la evapotranspiración al de la lluvia (Nn= ETP - LL)
A.
Verdadero
B.
Falso
2.
La eficiencia de aplicación del riego se refiere al número de aspersores, difusores o goteros que tiene el sistema, lo que permitirá regar en mayor o menor tiempo.
A.
Verdadero
B.
Falso
3.
La fracción de lavado se refiere a la cantidad de agua extra que hay que aportar en el riego, con el objetivo de lavar las sales aportadas
A.
Verdadero
B.
Falso
4.
La eficiencia de aplicación en el riego localizado es de un 85-90%, en el riego por aspersión de un 70-80% y en el caso del riego en superficie de un 60%
A.
Verdadero
B.
Falso
5.
A la hora de calcular las necesidades de riego, habrá que aportar una cantidad de agua extra para el lavado de sales. Una vez aportado este extra, pasamos a obtener lo que denominamos necesidades netas de riego (Nn)
A.
Verdadero
B.
Falso
6.
A la hora de evaluar el riesgo de salinidad de un suelo, se mide la conductividad eléctrica del agua de riego, ayudado por un conductivímetro que registra los valores en dS/m (decisiemens por metro) o en mmho/cm (milimhos por centímetro)
A.
Verdadero
B.
Falso
7.
Un agua salina utilizada en el riego puede favorecer el desarrollo del cultivo con el aporte del sodio como elemento nutritivo
