Son animales muy sociables y agradables, además se adaptan a todas las circunstancias y es fácil convivir con ellos.
Además se pueden acariciar y son animales cariñosos.
Son inteligentes y tienen mucha capacidad de aprendizaje.
Como todo animal que tenemos en casa, necesita de un lugar propio donde sentirse protegido y tranquilo.
Se alimenta de zanahorias y preparados que venden en las veterinarias.
Suelen ser de buena calidad y de precio asequible.
En verano es recomendable que estén a la sombra y bien ventilados ya que no tolera demasiado bien el calor.