· Lenguaje nulo, limitado o lo tenía y dejó de hablar.
· Obsesión por los objetos, por ejemplo, le gusta traer en la mano un montón de lápices o cepillos sin razón alguna.
· No tiene interés por los juguetes o no los usa adecuadamente.
· No responde a su nombre.
· Gira o se mece sobre sí mismo.