Un
día
de
éstos
(
fragmento
)
Gabriel
García
Márquez
Después
de
las
ocho
hizo
una
pausa
para
mirar
el
cielo
por
la
ventana
y
vio
dos
____________________
pensativos
que
se
secaban
al
sol
en
el
____________________
de
la
casa
vecina
.
Siguió
trabajando
con
la
____________________
de
que
antes
del
almuerzo
volvería
a
llover
.
La
voz
____________________
de
su
hijo
de
once
años
lo
sacó
de
su
____________________
.
-
Papá
.
-
Qué
.
-
Dice
el
____________________
que
si
le
sacas
una
muela
.
-
Dile
que
no
estoy
aquí
.
Estaba
puliendo
un
diente
de
oro
.
Lo
retiró
a
la
distancia
del
brazo
y
lo
____________________
con
los
ojos
a
medio
____________________
.
En
la
____________________
de
espera
volvió
a
____________________
su
hijo
.
-
Dice
que
sí
estás
porque
te
está
oyendo
.
El
____________________
siguió
examinando
el
diente
.
Sólo
cuando
lo
puso
en
la
mesa
con
los
trabajos
terminados
,
dijo
:
-
Mejor
.
Volvió
a
operar
la
____________________
.
De
una
cajita
de
cartón
donde
guardaba
las
cosas
por
hacer
,
sacó
un
____________________
de
varias
piezas
y
empezó
a
pulir
el
oro
.
-
Papá
.
-
Qué
.
Aún
no
había
cambiado
de
____________________
.
-
Dice
que
si
no
le
sacas
la
muela
te
pega
un
____________________
.
Sin
apresurarse
,
con
un
movimiento
extremadamente
tranquilo
,
dejó
de
____________________
en
la
fresa
,
la
retiró
del
sillón
y
abrió
por
completo
la
____________________
inferior
de
la
mesa
.
Allí
estaba
el
revólver
.
-
Bueno
-
dijo
-
.
Dile
que
venga
a
pegármelo
.
Hizo
____________________
el
sillón
hasta
quedar
de
____________________
a
la
____________________
,
la
mano
apoyada
en
el
borde
de
la
gaveta
.
El
alcalde
apareció
en
el
____________________
.
Se
había
afeitado
la
mejilla
____________________
,
pero
en
la
otra
,
hinchada
y
dolorida
,
tenía
una
barba
de
cinco
días
.
El
dentista
vio
en
sus
ojos
____________________
muchas
noches
de
desesperación
.
Cerró
la
gaveta
con
la
punta
de
los
dedos
y
dijo
suavemente
:
-
Siéntese
.
-
Buenos
días
-
dijo
el
alcalde
.
-
Buenos
-
dijo
el
dentista
.