Las tierras del pueblo
Cada varón casado recibía un topo
En el Tahuantinsuyo, las tierras se dividieron en partes destinadas
Las Tierras del Sol
reservadas para producir alimentos para las ofrendas a los dioses y el sustento de los sacerdotes encargados del culto.
de mayor extensión y estaban destinadas a los ayllus para que obtuvieran su sustento. Anualmente repartían las tierras entre los hombres y las mujeres aptos para trabajar la agricultura.
proporcionaban alimentos al inca, a su familia, a la nobleza, a los funcionarios, a los sirvientes, a los ejércitos en campaña y a los pueblos que por alguna razón perdían sus cosechas.
Sol, al estado y al pueblo
(medida calculada con pasos humanos equivalente a 0,27 hectáreas)