Deja que todos los componentes del ratón sequen bien antes de volver a limpiarlo.
En ambos casos es conveniente limpiar también la alfombrilla sobre la que deslizas el ratón con un trapo húmedo y un poco de alcohol.
¿Es un ratón óptico? Coge un paño húmedo (sin pelusa) y limpia bien todo el exterior del ratón. Fíjate bien en las cuatro almohadillas sobre las que se apoya, que es donde se suele acumular más suciedad impidiendo que el ratón se mueva bien.
Para limpiar un ratón de bola, el primer paso es desmontarlo extrayendo la bola. Limpia la bola y el ratón por fuera con un paño húmedo con algo de alcohol.
Las instrucciones varían dependiendo de si tienes un ratón óptico (el más común a estas alturas) o un ratón de bola antiguo, desconecta el ratón del ordenador para evitar problemas. Si se trata de un ratón inalámbrico, apágalo.
Tras limpiar bien todo el exterior, con un palillo de algodón humedecido limpia el agujero de la parte inferior por el que sale la luz roja. Deja que el ratón seque antes de volver a utilizarlo.
Es necesario limpiar también el interior del ratón, ya que en los rodillos suele acumularse bastante suciedad. Para ello, utiliza el paño húmedo y un palillo de algodón con alcohol.
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