Esta decisión será fundamental para el establecimiento de nuestra marca personal.
Reconocer cómo se va a construir nuestra reputación
Identificar cuáles son las necesidades que aún se encuentran insatisfechas en el área de nuestro interés
Definir y decidir qué vamos a hacer, para lo cual será muy importante analizar cómo esperamos que impacte nuestra marca personal
Bajo esta instancia debemos observar que existe una identidad firme en la que todo coincide: nuestro nombre es nuestra marca, los contenidos refieren a los objetivos previstos y se deducen de la marca. Incluso aquí será el momento de trazar subfases para el desarrollo de nuestro plan, en una secuencia que nos permita maniobrar los esfuerzos y sostenerlos en el tiempo.