Desarrollo
Motricidad: gruesa y fina
Desarrollo psicomotor
Lateralidad
Aspectos del desarrollo psicomotor
Estructuración espacio - temporal
Desarrollo físico
Se refiere a la preferencia de utilización de una de las partes simétricas del cuerpo humano, mano, ojo, oído y pie. El proceso por el cual se desarrolla depende de la dominancia hemisférica.
Se refiere a los cambios corporales que experimenta el ser humano, especialmente en peso y altura, y en los que están implicados el desarrollo cerebral, como ya se ha indicado, el desarrollo óseo y muscular.
1. Control sobre acciones musculares más globales, como gatear, levantarse y andar (locomoción y desarrollo postural). 2. Control de los músculos más pequeños del cuerpo utilizados para alcanzar, asir, manipular, hacer movimientos de tenazas, aplaudir, virar, abrir, torcer, garabatear, por lo que sus habilidades incluyen un mayor grado de coordinación de músculos pequeños y entre ojo y mano (prensión).
Proviene de factores genéticos, considerados con frecuencia los responsables últimos del potencial biológico, así como de factores del medio ambiente, es decir, factores sociales, emocionales y culturales que interactúan entre sí de forma dinámica y modifican de forma significativa el potencial del crecimiento y desarrollo.
El desarrollo motor de los niños depende principalmente de la maduración global física, del desarrollo esquelético y neuromuscular. Las habilidades motoras que se van adquiriendo hacen posible un mayor dominio del cuerpo y el entorno.
La orientación espacial implica establecer relaciones entre el cuerpo y los demás objetos, está asociada al espacio perceptivo e incluye esencialmente relaciones topológicas. La estructuración del espacio conlleva adquirir nociones de conservación, distancia, reversibilidad, etc.
La psicomotricidad supone la interrelación entre las funciones neuromotrices y las funciones psíquicas en el ser humano.