1
Representación de sí, que se opone a las representaciones que “el otro” produce desde el exterior, de lo cual resulta su imposición como un esencialismo.
2
Es definida a la inclinación o preferencia hacia miembros del sexo opuesto heterosexual, del mismo sexo homosexual o de ambos sexos bisexual.
3
Es la capacidad humana de establecer lazos con otros seres humanos que se construyen y mantienen mediante las emociones.
4
Es una experiencia conductual de la sexualidad personal donde el componente erótico de la sexualidad es el más evidente
5
El conjunto de aprendizajes que permiten el buen desarrollo de las capacidades sexuales, su coordinación con las demás facultades y la consecución de una buena interrelación con las otras personas que resulten estimulantes por su condición sexuada y sexual, consiguiendo altos niveles de espontaneidad y comunicación, y también de respeto y estima.
6
La integración de los elementos somáticos, emocionales, intelectuales y sociales del ser sexual, por medios que sean positivamente enriquecedores y que potencien la personalidad, la comunicación y el amor.
7
Se refiere a una dimensión fundamental del hecho de ser un ser humano; basada en el sexo, incluye al género, las identidades de sexo y género, la orientación sexual, el erotismo, la vinculación afectiva y el amor, y la reproducción. Se experimenta o se expresa en forma de pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, actividades, prácticas, roles y relaciones.
8
Es la capacidad humana de experimentar las respuestas subjetivas que evocan los fenómenos físicos percibidos como deseo sexual, excitación sexual y orgasmo, y que por lo general se identifican con placer sexual.
9
Se refiere al conjunto de prácticas, creencias, representaciones y prescripciones sociales que surgen entre los integrantes de un grupo humano en función de una simbolización de la diferencia anatómica entre hombres y mujeres.
10
Apunta a las características fisiológicas y sexuales con las que nacen mujeres y hombres.