4.
El experimento de Urey y Miller con el que pretendieron demostrar la validez de la teoría de Oparin, consistió, básicamente, en someter una mezcla de metano, amoníaco, hidrógeno, dióxido de carbono, nitrógeno y agua a descargas eléctricas de 60.000 voltios que simulaban relampagos y temperaturas muy altas; buscando imitar las condiciones de la tierra primitiva. Como resultado, se observó la formación de una serie de moléculas orgánicas, entre las que se destacaba