Consumo de drogas, alcohol y tabaco.
Sexualidad irresponsable: embarazos no planeados, enfermedades de trasmisión sexual, inicio temprano de la actividad sexual.
Las condiciones económicas de la familia.
Inseguridad, robos, asesinatos.
Uso inadecuado de las tecnologías de la información y comunicación.
Violencia y abuso entre pares (bullying).
Depresión, estrés y suicidio.
Accidentes automovilísticos por excesivo consumo de alcohol y conducción temeraria.
La contaminación ambiental.
Abusos y violencia doméstica.
Movimientos migratorios.
Los problemas familiares.
La falta de acceso a la educación.
Trastornos de la conducta alimentaria: anorexia, bulimia y obesidad.