Luego tomé agua y nutrientes y me abrí fue cuando nació mi raíz.
Acá soy una semilla enterrada en el jardín.
Creció mi tallo y me aparecieron las primeras hojas.
El sol, el agua y varios nutrientes de la tierra hicieron que siga creciendo.
Ya no aguante mas y salí a la superficie.
Mi tallo mi raíz y mis hojas lucían bien fuertes y me veía genial con mis frutos.