Si fumas, no lo hagas en lugares cerrados y donde haya productos inflamables, no tirar las colillas en cualquier sitio y asegúrate que el cigarro quede bien apagado.
Mantén alejados de estufa, como mínimo un metro, objetos que puedan quemarse, por ejemplo, sofás, cortinas, ropa puesta a secar etc.
Debe haber ventilación necesaria que comunique con el exterior, donde haya estufas y calentadores, pues en caso contrario existe la posibilidad de intoxicación por fugas de gas.
Antes de salir o de acostarse, comprueba que ningún aparato que pueda generar un incendio quede encendido, cierra las llaves del paso del gas.
Mantén los cerillos y encendedores fuera de alcance de niñas y niños.
No conectes varios aparatos electrónicos en un solo contacto, pues puede provocar sobrecalentamiento, mantén en buen estado la instalación eléctrica.
Al salir o irte a dormir apaga velas y veladoras. Evita que queden al alcance de los niños.
En caso de fuga de gas, evitar encender cerillos, así como apagar luces y ventilar al máximo todas las habitaciones.
Ten a la mano un croquis de la casa o de tu trabajo para ubicar las salidas de emergencias zonas de menor riesgo.
Revisar periódicamente que los tanques, tuberías mangueras y accesorios de gas estén en buenas condiciones.
En caso de que salgas de casa, protege a los niños y niñas evitando que estén sin supervisión de alguna persona adulta.
