En verdes ramas nací, en molino me estrujaron, en un pozo me metí, y del pozo me sacaron a la cocina a freír.
Con el dinero lo compro, con los dedos lo deslío, por la cara me lo como.
En el campo me crié, atada con verdes lazos, y aquel que llora por mí me está partiendo en pedazos.
Tengo duro cascarón, pulpa blanca y líquido dulce en mi interior.
Blanco es, la gallina lo pone, con aceite se fríe y con pan se come.