Las civilizaciones de Oriente

¿Te imaginas un mundo donde las herramientas de piedra eran lo más común? ¡Así era la vida antes de la Edad de los Metales! Alrededor del año 4000 a.C., un gran descubrimiento cambió todo: ¡la fundición del cobre!

El cobre se convirtió en la estrella de la época: se utilizaba para fabricar hachas, cuchillos, puntas de flecha, vasijas, joyas y adornos. Era un símbolo de riqueza y poder.

Con el tiempo, se descubrieron otros metales: el bronce (más duro que el cobre) y el hierro (el más resistente). Cada uno trajo nuevas herramientas y posibilidades.

La Edad de los Metales impulsó el desarrollo de las civilizaciones: la agricultura se volvió más eficiente, el comercio floreció y las ciudades crecieron.

También trajo desigualdad: quienes trabajaban en las minas y forjas tenían una vida dura, mientras que otros disfrutaban de los beneficios de los nuevos productos metálicos.

La Edad de los Metales sentó las bases para el mundo moderno: permitió el surgimiento de grandes civilizaciones, el comercio a gran escala y la construcción de obras monumentales.

¡Atrévete a explorar este fascinante período! Investiga cómo cada civilización utilizó los metales y cómo estos avances impactaron en su cultura y socedad.