1
Al consumir esta sustancia provoca paranoia y ansiedad, así como la perdida de control de emociones.
2
Aumentan el riesgo de sufrir trastornos físicos importantes y mentales.
3
Produce movimientos involuntarios de los ojos, temblores, agitación y rigidez.
4
Esta sustancia afecta a la atención y a la coordinación, también a la memoria y a la capacidad de aprendizaje.
5
Genera una adicción rápida, riesgo de sobredosis y la interrupción del consumo conlleva la aparición de un fuerte síndrome de abstinencia.
6
Ganas de bailar y conexión con uno mismo, la música y la gente que hay alrededor.
7
También provoca ansiedad y paranoias.
8
Al consumir esta sustancias sientes que te disminuye la atención y la coordinación.
9
Aumenta el riesgo de padecer cáncer y enfermedades cardiovasculares y respiratorias, entre muchas otras.
10
Te sientes menos fatigado como con mas energía aunque crea trastornos físicos y psiquiátricos.
11
Provoca paranoia y ansiedad y en dosis altas provoca modificación del estado de conciencia y “viaje psicodélico”.